
Contexto Económico
La guerra comercial entre Estados Unidos y China había llegado a una tregua entre ambas potencias por un período de 90% días, donde Estados Unidos redujo los aranceles desde el 145% al 30% para los bienes chinos, mientras que China redujo del 125% al 10% los aranceles de los productos estadounidenses.
Sin embargo, la semana pasada las tensiones se volvieron a encender luego de Trump amenazara a Apple con imponerles un 25% de aranceles si no producía sus dispositivos en Estados Unidos. Esto nuevamente golpeó la cotización de sus acciones que reaccionaron con un 3% a la baja.
La pérdida de confianza del presidente Trump es irreversible y no sólo Apple, sino muchas empresas que operen en Estados Unidos tendrán que revisar sus pronósticos y cambiar sus estrategias, considerando las sorpresivas amenazas del presidente norteamericano.
Lo cierto es que retrocede luego de una amenaza. Esto sucedió con la imposición de los aranceles recíprocos, con los aranceles a China y recientemente con la presión que hacía en la guerra Rusia-Ucrania.
La contraparte de esto es que el programa fiscal que fue llevado al congreso norteamericano, prevé una quita de impuestos a la construcción de fábricas.
Además de esto, los indicadores de la economía en Estados Unidos indican una ralentización en el consumo minorista, porque los agentes avecinan una recesión si la política comercial de Trump vuelve a elevar los aranceles.
ESTRUCTURA DEL NEGOCIO
En “la ciudad del Iphone”, como le llaman a Zhengzhou (capital de Henan) se encuentran las fábricas de Foxconn, que es la empresa subcontratada por Apple para la producción del hardware y ensamblado. Además de esto, cuenta con estructura logística para exportar a todo el mundo.
La razón de que la producción se realice en China se explica por el lado de la cadena de suministro, mano de obra calificada y más barata que Estados Unidos. Los componentes de los productos de Apple también se fabrican en Asia, como los microchips.
Apple ha ampliado su producción a la India produciendo el Iphone 13 y 15, también mediante Foxconn y Wistron y a Vietnam con la producción de AirPods, iPads y MacBook, a través de sus socios manufactureros.
El gigante tecnológico también ha invertido en Estados Unidos, especialmente en Investigación y Desarrollo, duplicando su inversión en los últimos 4 años. Esto se da en el contexto de la duplicación del Fondo de Fabricación Avanzada.
Recientemente anunció que invertirá más de US$500 millones en una planta en Houston destinada a la capacitación de trabajadores y con el objetivo de avanzar en la Inteligencia Artificial para potenciar su plataforma de Apple Intelligence.
RESULTADOS FINANCIEROS Y PERSPECTIVAS
A principios del mes de mayo, Apple presentó los resultados financieros correspondientes al segundo trimestre de 2025, donde sus ingresos por ventas alcanzaron los US$95.359 millones, cayendo 23% respecto del trimestre anterior, pero anotando una suba del 5% respecto del año anterior.

El crecimiento interanual de las ventas se explica mayormente por un aumento del 12% en el segmento de servicios. Mientras que es el segmento de productos el que determinó la caída trimestral con un 30% abajo.
Esto debería indicar que Apple tiene que centrar su estrategia en la ampliación de centros de dato, la inversión en Apple Intelligence para liderar la aplicación de Inteligencia Artificial y los servicios por suscripción.


Por su parte, la fabricante de iPhones obtuvo beneficios netos por US$24.780 significando una caída del 32% respecto del trimestre anterior y un aumento del 5% respecto del año anterior. Esto dejo una ganancia de US$1,65 por acción que representa un incremento del 8% interanual.

El crecimiento interanual de ventas va acorde a resultados de trimestres anteriores, indicando que Apple brinda sostenibilidad a sus accionistas. De hecho, declaró dividendos por US$0,26, en línea con los declarados en trimestres anteriores.

ESTRATEGIA Y PERSPCTICAS
Durante los últimos resultados financieros correspondientes al Q1-2025, la compañía afirmó que se espera un impacto de aproximadamente US$900 millones con la aplicación actual de los aranceles.
La compañía se enfrenta a dos escenarios posibles: 1) enfrentarse a la amenaza de Trump y considerar un 25% como mínimo de aranceles, mientras continúa su producción en China, con bajos costos de mano de obra y 2) trasladar su planta a Estados Unidos y aprovechar el alivio fiscal durante la construcción. Esta evaluación deberá ser de costo-beneficio.
Lo cierto es que, con las actitudes del presiente de Estados Unidos, no tiene certeza de cuánto serán los aranceles y puede enfrentarse, en un futuro, a una mayor carga impositiva.
Por otro lado, Apple viene lidiando con la competencia en el mercado chino, lo que ha estancado su crecimiento en los últimos períodos.
El anunció de la construcción de la planta en Houston, seguido de que Apple planea ampliar los centros de datos en Arizona, California, Iowa, Nevada, California del Norte, entre otros y de abrir una academia de manufactura en Detroit (Apple Manufacturing Academy), indican que quiere disminuir su dependencia de sus socios manufactureros, como Foxconn, Pegatron y Wistron.